
Había una vez un lobo cauto y silencioso.Una noche salió del bosque atraído por el olor del rebaño.
Iba a pasito lento y se acercó al redil lleno de cabras.
Aunque iba con cuidado para no despertar al perro, puso la pata encima de una tabla y con el ruido el perro se despertó y le mordió hasta hacerle sangre.
El lobo se fue muy enfadado con la pata sangrando y con la lección aprendida
carlos
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